jueves, 20 de agosto de 2009

Entrevista a Rodolfo Araya

Por Kimberly Mata Valverde
Los años no se ven pasar por este hombre desde que lo recuerdo es el mismo. Siempre tan sencillo y humilde viajando en bus y saludando a las personas con gusto. Con esos ojos profundos que delatan un ser humano noble y esa boca delgada que sabe recrear a infinidad de personajes utilizando tonos de voz distintos. Vestía una camisa azul, jeans y unas sandalias café, cómodas y justas para el clima caluroso del medio día del sábado. Más que una entrevista hablar con don Rodolfo es una plática fluida y muy amena. Quién crea que se va a encontrar con el amargado y grosero hombre que interpreta cada viernes por la noche en la serie “La Pensión” no está cerca de la esencia de este caballero. Araya no ahorra palabras, lo cual es una gran ventaja. Descubrí al finalizar la entrevista que quién guiaba y asesoraba cada decisión de don Rodolfo durante su juventud, era su padre. Cada vez que comentaba de alguna situación que le tocaba abandonar o empezar, estaba ligada a la opinión de su progenitor.
Me dejé llevar por el impulso de visitarlo en su casa ubicada en Villas de Ayarco. Sin cita previa le pedí que me concediera un poco de su tiempo. Con su enorme sonrisa me aseguró que dentro de media hora me podría atender por que iba camino a la feria, entendí y volví cuando él me lo sugerió.
Me atendió en lo que él llama la bodega de su casa. Está junto a la pulpería que tiene dentro de su propiedad. Es un lugar pequeño y lleno de cosas: había una mesa con una televisión, muchos periódicos y facturas de los distribuidores de su pulpería. Había dos sillas de frente las cuales utilizamos para la entrevista. Tenía una moto detrás de mi asiento y al lado un sofá grande y rojo.
Inicié la conversación preguntandole en qué lugar estudió actuación. Me comentó que fue por una casualidad ya que él cursaba el cuarto año de colegio y paralelo a eso se estaba iniciando en Costa Rica una novela en canal 4 y su papá que era actor y estaba involucrado en la producción, le preguntó si quería participar, ya que ocupaban un muchacho de la edad de él. Hizo la prueba y se quedó con el papel. Participó un año en la conocida novela El Diario de una Niña.
--Terminó la novela y el director me dijo que quería conseguirme una beca para irme a estudiar artes dramáticas en Alemania, pero yo le dije espéreme un año a que yo saque el bachillerato. Me dice tranquilo anda. Cuando saqué el bachillerato me vine a buscarlo y se había ido del país. Entonces hay murió el asunto.
Años después se matriculó en el Taller Nacional de Teatro alentado por su progenitor.
Le dí una ojeada a las preguntas que tenía apuntadas en mi libreta azul y pequeña. Continué ¿Considera usted que estudiar actuación en Costa Rica es una profesión que permita realizarse como persona a nivel económico, social y personal?
-- Mira personalmente sí, económicamente no, no da para vivir de eso. Por ejemplo, todos los actores de La Pensión tenemos dos trabajos mínimo, por que no alcanza para vivir. Fíjate que si hubiéramos nacido y estuviéramos trabajando en Estados Unidos seríamos millonarios todos haciendo lo mismo, pero nos tocó nacer en Costa Rica
Su papá era actor y eso no fue lo que decidió el destino de don Rodolfo, él nunca imaginó terminar en el mundo del arte. Su verdadero sueño era ser piloto.
--No lo cumplí por que un tío mío se paseó en mi carrera. Íbamos para una finca mi tío, mi papá y yo. Y mi papá le contó, era un fin de semana, y le contó: fíjate que el lunes empieza Rodo a estudiar aviación a entonces le dijo a que bonito y ya le compraste el ataúd. Y lo agarró y mi tata callaba. Cuando llegamos a la casa me dijo Rodo te pago la carrera que quieras menos aviación y ya se paseo en mí.
Su rumbo dio un giro de 380 grados cuando Alfredo Catania confió en su talento, a sus 23 años lo invita a participar en Historias para ser contadas, de Osvaldo Dragún. Significando un hecho importante en su carrera de actor.
-- Mira fue mi primer trabajo profesional en teatro, por que el que había hecho anteriormente fue en televisión y fue importantísimo por que fíjate que de casualidad uno de mis maestros fue Oscar Feslerd…
Justo estaba calentando con las preguntas cuando por una puerta entró Susan, la esposa de don Rodolfo, pidiéndole ayuda en el negocio, ya que era hora de almuerzo y estaba el lugar lleno. Inmediatamente él aseguró con tono serio que no podía asistirle, su esposa insistió. Tuve que decirle que no había problema, yo podía esperar. Don Rodolfo me ofreció encender el televisor mientras tanto, le agradecí pero le dije que me iba a encargar de unos apuntes.
Cuando volvió le refresqué la pregunta y el continuó hablando.
-- Eran cuatro historias, entonces hacía diferentes personajes y además de presentarnos en la sede en San José en el Teatro Carpa, anduvimos viajando por todo el país y en Nicaragua. Dábamos funciones a la salida de misa y en diferentes lugares y pasábamos un sombrero para que nos echaran monedas y con eso cargar el carro de gasolina para ir a otro lugar
Me comentó que la obra que más le gustó y en la que participó fue (un poco dudoso de su respuesta) la Fiaca, que se hizo en el Teatro la Carpa.
Luego retoma lo del maestro Oscar Feslerd, frase que me dejó inconclusa por ir a colaborarle a su mujer en el negocio.
-- Pero lo que te estaba contando era que Oscar Feslerd era francés, ya murió. Él me estaba formando a mí en Costa Rica junto con mis compañeros y el de casualidad había formado en Argentina a todos los Catania con las técnicas de Constantin Stanislavski.
Entonces cuando Alfredo me llamó nos entendimos perfecto de tu a tu por que era la misma escuela y el mismo maestro.

¿Cómo llegó a La Pensión?

-- Me llamaron para una navidad a mi casa, Oscar Castillo y me dijo: Mira Rodo el año entrante empezamos a filmar una serie y yo quisiera que me hicieras uno delos personaje pero necesito dos días enteros para grabar y un medio día para análisis del capítulo que sigue. Necesito saber ya si podes o no por que aquí tengo la periodista de La Nación y tengo que darle el dato. Yo lo pensé rápidamente y me dije sí yo puedo acomodarme inmediatamente me dijo tómalo como regalo de navidad y nos hablamos en enero.
Yo nunca supe cuál era la serie, ni que personaje, nada. Al día siguiente me llamaron de La Nación que si podía ir para tomar unas fotos entonces fui y cuando llegué me encontré con Manolo y con la que hacía de Bruja a principios de la serie. En eso salió la periodista y me dice: ¡Hay usted es don Pedro! --Cómo don Pedro-- Sí sí en la serie pase vamos a tomar las fotos.
Tuve que preguntarle a ella de que trataba la serie y empezó a contarme ella de qué trataba la serie y como era el personaje mío. Y claro cuando ya me reuní con toda la gente y Oscar en enero, me contaron claramente, me dieron el perfil del personaje.
Don Rodolfo comentó que su personaje ¨don Pedro¨ tuvo una infancia muy solitaria. Con una madre castrante y un padre amoroso. Es un personaje con muy buenos sentimientos pero además es demasiado rígido, muy recto, muy peleón y en cierto modo es como un cáscara que el pone para que no se le arrimen mucho.
¿Cuál es la receta para qué el programa tenga el éxito que tiene reflejado en estos 11 años, transmitido en horario estelar y un viernes?
-- Yo creo que son varias cosas: primero que se logró unir el grupo de actores idóneo, por que todos estamos más o menos al mismo nivel en cuanto a calidad de actuación. Luego los guionistas son excelentes imagínate lo que es escribir una obra por semana durante 11 años sin repetir, es que son genios.
Dos historias muy diferentes y dos caracteres opuestos las de don Pedro y don Rodolfo, ¿en qué punto se encuentran estos dos seres humanos?
Se queda un poco impresionado por la pregunta – Y que difícil por que la verdad es que don Pedro es totalmente otra cosa de lo que soy yo—Piensa unos segundos y continua con su respuesta: –Lo único es que soy yo en los dos. Inmediatamente suelta su acostumbrada risa
Don Rodolfo comenta que la gente se le acerca, lo saluda con gusto y hasta lo abrazan, a pesar de que su personaje no es muy agradable y como él mismo dice: –el personaje que hago yo es bien feo, es un hombre que yo no lo quisiera en mi casa, es terrible y le hace la vida imposible a todo el mundo.
En este momento le advertí que pasábamos a preguntas de su vida personal y él como todo el caballero que es solo me contestó con su enorme sonrisa y dejó que yo prosiguiera con las preguntas.
¿Cuál es su fecha de nacimiento?
--26 de abril (hace una pausa de varios segundos) de 19 tarataraatara
Se ríe a carcajadas y le insisto para que me diga en qué año nació… termina de reírse y me dice 50.
Leí que en un momento usted quiso ser sacerdote ¿cuál fue el detonante para que eso sucediera?
-- Mira me entró una cuestión espiritual cuando yo estaba en primer año de colegio, en el Don Bosco con los padres Salesianos. Y me gustó mucho la forma en que nos educaban y toda la cosa. Por ejemplo todos los días en la mañana antes de entrar a clases teníamos misa. Y en la tarde todos los días antes de irnos para la casa teníamos oraciones en la iglesia. Además de eso se celebraban todas las cosas que se celebran en la iglesia durante todo el año.
Y me fui metiendo en una cuestión espiritual muy fuerte. Estuve pulseándola dos años para irme al Seminario Mayor en El salvador, pero mi papá me pidió un año más de prueba y cuando ya estaba en el segundo año y le aseguré que me quería ir me dijo: mira Rodo yo prefiero tener un ciudadano común y corriente a tener un hijo sacerdote que no vaya a servir yo sé que a vos te gustan las mujeres. Entonces vamos a hacer la última prueba y si la cumplimos te lo prometo que te vas. Te voy a cambiar de colegio te voy a poner en uno mixto.
Me pasaron al Rodrigo Facio y además ese año compré moto. Entonces mi vida cambió totalmente. Yo me iba a la salida de los colegios de mujeres, me hice de novia, no volví a misa. (Sonrió como si estuviera satisfecho de haber optado por la vida de ser un ciudadano sin sotana) O sea mi vida cambió.
Y ahora ¿es practicante de la fe católica?
-- Sí pero de una manera diferente a la mayor parte de la gente. Sí creo en Dios (dejó la sonrisa de lado y se puso serio para decirme esto) pero rarísima vez voy a misa. Yo siento que para comunicarme con Dios lo puedo hacer aquí o en cualquier lugar no tengo que ir a meterme a la iglesia. Y me molesta la gente que es necia… no soporto a esa gente… los que tratan de convencerlo a uno verdad.
Luego de saber si era practicante de lo que un día deseó con todas sus fuerzas pasé a pregunterle cómo iba eso de ser abuelo. Con un tono nostálgico y un poco más pausado empieza a contarme que fue un golpe fuerte, por que como fue noticia a nivel nacional, él iba por la calle y un vendedor de chances le gritaba ¡bien abuelo! -- Y yo pensaba cómo abuelo qué es esto!! Era como que no lo entendía y en cierto modo me chocaba que me digieran abuelo, yo no me sentía tan viejo.
Deja escapar su risa por el final de su comentario y continúa hablando.
-- Ya después cuando las chiquitas empezaron a crecer, por que quedaron cuatro, el varón se murió. Entonces yo le pedí a mi hija que por favor nunca dejara que sus hijas me digieran tito. Todo el mundo es tito en este país, yo le dije yo soy abuelo. Cuando yo llego y ellas dicen abuelo me gusta el sonido (deja escapar una sonrisa)
Don Rodolfo se casó hace 23 años con Susan Cedeño. Tiene 3 hijos: Luis Diego que tiene 22 años estudia y trabaja. Silvia es la mayor la de los bebés y el menor se llama Jorge, tiene 9 años y está en la escuela.
Y detrás de don Pedro…
Nombre: Rodolfo Araya
Estado civil: casado hace 23 años
Hijos: 3, dos hombres y una mujer.
Profesión: administrador de empresas y actor profesional.
Pasatiempos: la lectura y ver documentales
Obra de teatro favorita: La Fiaca.
En una entrevista que le realizó el periodista Ronald Díaz hace 4 años, usted se describe como alguien jovial de lo que no me queda la menor duda, pero también agregó que es tímido ¿Puede explicarme eso?
-- Mira es curiosísimo por que cuando yo estoy en el escenario a mí no me importa que hayan 100 o 500 personas sentados frente a mí, yo hago el personaje y lo desarrollo.
Pero por ejemplo si yo salgo del teatro y si todavía queda gente me siento horrendamente mal, entonces lo que hago es que paso disparado, saludo a una o dos personas de lejos y salgo huyendo. No sé me da cosa.
Y ahora he tenido que aprender por que ahora es en todo lado, en la calle. Antes era solo en el teatro que llegaban 100 viejos 150 en una noche. En cambio ahora cada semana lo ve a uno todo el país. Entonces aunque yo vaya a provincias y todo la gente me anda saludando en la calle y tuve que aprender a la fuerza.
¿Cuál es la receta para andar siempre esas enorme sonrisa en la cara?
-- Hay tan linda… (Se ríe) sabes que es lo que pasa que cuando yo me topo con una persona que me da a mí una buena vibra la sonrisa se me sale sola.
Un hombre amante de la lectura. Asegura que un libro que lo marcó fue El Código Da Vinci, el cual terminó de leer en 5 días. Además le gusta mucho los documentales transmitidos en National Geographic.
Considera que su mayor logro es la familia y la casa que tiene --El sentir que yo solo logré desarrollarme en la línea que llevo hasta en este momento en mi vida. Sin haberme dedicado nunca a las drogas ni a nada de eso y puedo darles en cuanto a eso el ejemplo a mis hijos.
¿Una virtud?
--Una virtud que yo tenga que difícil… (Se ríe) Yo no puedo tener nada pendiente, es una virtud que me hace sufrir. Por ejemplo si me tengo que aprender el capítulo de La Pensión que generalmente lo empiezo un viernes y no lo hago el sábado ando con una cosa que me quema por dentro y una preocupación y así paso todo el día hasta que
no lo agarre y me lo aprenda
¿Cómo se describe?
-- Como un hombre trabajador, muy recto en eso si me parezco a don Pedro. Yo no me permito cosas que sean incorrectas ni tampoco a mis hijos.
Lo entrevisté queriendo demostrar que sus ojos iluminados y sus ganas de vivir son el verdadero ser atrapado dentro del famoso personaje de don Pedro.
Resulta difícil olvidar una conversación con este hombre. Siempre tiene esa hermosa sonrisa sobresaliendo en su rostro. Siempre mostrando que la juventud y las ganas de continuar cultivando éxitos van más allá de las canas. Es un verdadero caballero con el que es un gusto platicar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario